
Endometriosis: una enfermedad frecuente que merece diagnóstico y tratamiento oportuno
Por el Dr. Roberto Hugo Navarini (Mat. 12261). Ginecólogo. Grupo Oroño.
La endometriosis es una patología ginecológica crónica que afecta aproximadamente al 10% de las mujeres. Se produce cuando el tejido que recubre el interior del útero (endometrio) crece fuera de su lugar habitual, generando inflamación y síntomas que varían según los órganos comprometidos: peritoneo, ovarios, intestino, vejiga, uréteres y nervios, entre otros.
Un desafío diagnóstico
El principal obstáculo es la demora en su detección: en promedio, pasan 7 años desde la aparición de los primeros síntomas hasta el diagnóstico. Esto ocurre porque el dolor menstrual o pélvico muchas veces se naturaliza, tanto por parte del paciente como, lamentablemente, por los médicos.
Los signos de alerta incluyen:
- Dolor menstrual intenso.
- Dolor pélvico crónico.
- Dolor durante las relaciones sexuales.
- Dolor al defecar o al orinar.
- Infertilidad.
- Cansancio persistente y distensión abdominal.
La evaluación médica comienza con un interrogatorio dirigido y un examen físico. La ecografía intravaginal, realizada por profesionales capacitados, es el estudio inicial de elección. En algunos casos, se complementa con resonancia magnética.
Tratamiento personalizado
El abordaje depende de cada paciente. El objetivo es controlar los síntomas y preservar la calidad de vida, combinando tratamientos médicos —como hormonoterapia y analgésicos— con cambios en el estilo de vida. La supresión de la menstruación suele ser una estrategia eficaz para reducir el dolor.
La endometriosis no es solo un problema ginecológico. El tratamiento integral requiere un equipo multidisciplinario que puede incluir especialistas en fertilidad, psicología, sexología, kinesiología y nutrición. En algunos casos, cuando las medidas médicas no resultan efectivas, se evalúa la cirugía para extirpar las lesiones, siempre priorizando la preservación de la fertilidad.