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Tratar a tiempo a un paciente amputado, clave para una correcta rehabilitación
05 sep, 2023

Tratar a tiempo a un paciente amputado, clave para una correcta rehabilitación

Dra. Dowhuszko María Guillermina. Coordinadora de la Clínica de Amputados, Prótesis y Ortesis de INECO Neurociencias Oroño.

El aumento progresivo de la esperanza de vida en la población también eleva la incidencia de enfermedades íntimamente relacionadas con la edad. Entre ellas, podemos mencionar la enfermedad vascular periférica y la diabetes mellitus. La falta de controles médicos rutinarios, que se incrementó durante la Pandemia de Covid-19, provocó complicaciones propias de estas enfermedades crónicas.

Entre ellas, las amputaciones, que son la falta total o parcial de un miembro superior o inferior. La causa puede ser congénita o adquirida por diversas patologías (vasculares por obstrucción de una arteria en pacientes fumadores, diabetes, infecciosas, traumáticas, entre otras).

En este contexto, las prótesis cumplen la función de ser una extensión artificial que reemplaza una parte del cuerpo cuyo principal objetivo es sustituir esa parte además de utilizarse con fines estéticos.

Una vez que el paciente tiene definida la amputación -o ya fue amputado- debemos realizar un abordaje terapéutico que incluye a una gran cantidad de profesionales de la salud, entre ellos:

Médico especialista en medicina física y rehabilitación: realiza evaluación clínica y funcional de los pacientes. Es el responsable del seguimiento del paciente y coordina el tratamiento en sus diferentes etapas y determina cuándo está listo para el entrenamiento protésico.

Kinesiólogo: teniendo en cuenta en la etapa que se encuentra el paciente, realiza el entrenamiento en el departamento de kinesioterapia y planifica el tratamiento.

Terapista ocupacional: aplica estrategias para mejorar la independencia del paciente en las actividades de la vida diaria.

Psicólogo: realiza la evaluación psicológica del paciente y aplica terapias compensadoras según los resultados de su evaluación

Además, podemos mencionar al médico especialista en cirugía vascular y al cardiólogo, traumatólogo, enfermeros, terapeutas ocupacionales y técnicos ortopedistas.

Podemos concluir que la rehabilitación del paciente amputado es un proceso en el cual se incluye el manejo físico, psicológico, ocupacional y no solo la simple restitución del miembro amputado.

El tratamiento global se debe considerar como un procedimiento dinámico continuo, que comienza en el momento de la lesión y continúa hasta que el paciente haya alcanzado la máxima utilidad de su prótesis y/o sea capaz de realizar sus actividades esenciales y de ocupar un empleo.

Rehabilitación para mayor independencia

La rehabilitación debe considerar el uso, utilización y control de la prótesis para conseguir el máximo de independencia en las actividades de la vida diaria, profesional y recreativa.

El tratamiento no deberá limitarse sólo a la adaptación protésica, sino también al proceso inicial de recuperación y a la atención integral desde el inicio de la fase hospitalaria.

Los objetivos son brindar una atención integral a todos los pacientes amputados que ingresen en el servicio de rehabilitación; evaluar clínica y funcionalmente a los pacientes; y mejorar las capacidades en los pacientes amputados. Resulta útil dividir el programa de rehabilitación en cuatro fases para poder definir objetivos de tratamiento:

Fase prequirúrgica o preoperatoria: acompañar y preparar al paciente para la amputación.

Fase quirúrgica: cuidar la cicatriz y el manejo del dolor .

Fase preprotésica:conseguir una independencia respecto al autocuidado y la movilidad, así como preparar al paciente y a su miembro residual para el uso de una prótesis. No todos los pacientes logran un equipamiento de prótesis para la marcha -por alteración visuales, cognitivas, falta de equilibrio y fuerza general, entre otras causas- por lo que se entrena su independencia máxima en silla de ruedas .

Fase protésica: se determina cuál es el elemento protésico que se adecua más a las necesidades fisiológicas y de la vida diaria del paciente.

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